23/4/12

El otro Rebelde. Sal Mineo


Salvatore Mineo Jr. nació en el barrio neoyorkino del Bronx el 10 de enero de 1939. Su padre era un inmigrante de Sicilia que se dedicaba a fabricar ataúdes.

El joven Salvatore tuvo una infancia problemática: expulsado del colegio a la temprana edad de ocho años, formó parte de una pandilla dedicada a cometer varios robos. Sus padres, tratando de apartarle de las calles, le matricularon a los diez años en una escuela de baile y arte dramático. Allí el joven Sal se apasionó de inmediato por el mundo de la danza y de la interpretación, dejando de lado a sus compañeros delincuentes. En varias oportunidades los alumnos de la escuela hicieron breves apariciones en programas de televisión. Una tarde, unos productores de Broadway lo vieron ensayando en la escuela, y era justo lo que andaban buscando, un niño italiano para actuar en "La Rosa Tatuada" de Tennessee Williams. Dos días más tarde lo contrataban para actuar, fue el comienzo de Sal Mineo, el actor de 11 años.

En 1951, ya con varios años de experiencia profesional, consiguió debutar y destacarse en Broadway gracias a producciones teatrales como "La Rosa Tatuada" y "The Little screwball", también en el musical "El rey y yo". Este musical llevaría a la fama a Yul Brynner. Luego trabajó con un joven Tony Curtis en "Six Bridges to cross".


A mediados de la década dio el salto al cine con pequeños papeles en "Atraco sin huella (1955)", de Joseph Pevney, "La guerra privada del mayor Benson (1955)", de Jerry Hopper y especialmente "Rebelde sin causa (1955)", película de Nicholas Ray protagonizada por otro grande, James Dean. En este filme, Mineo era el actor más joven de la película, interpretando el personaje del delincuente juvenil llamado Platón -el más recordado de toda su carrera- le llevó a ser nominado a la candidatura para el Oscar como mejor actor de reparto. De esta misma época son también los intentos del actor por convertirse en estrella del rock and roll, llegando a grabar varios singles e incluso un LP, que cosecharon discretas ventas.

El éxito de "Rebelde sin causa", lejos de lanzarle al estrellato, le consagró como idóneo para encarnar papeles secundarios en los que da vida a jóvenes perdedores marcados por un destino trágico.
 
Su carrera cinematográfica fue breve ya que murió muy joven, sin embargo fue actor de reparto en grandes películas donde cabe destacar "Gigante (1956)" de George Stevens, donde repitió colaboración con James Dean; "Marcado por el odio (1956)" dirigido por Robert Wise; en 1957 filma "Dino", donde se enfrenta a un padre golpeador y obtiene una muy buena crítica por su papel.

En 1958 interviene en "Tonka", una película de Disney ambientada en el lejano oeste donde interpretaba el personaje del guerrero comanche Búfalo Blanco, "Éxodo (1960)", de Otto Preminger, donde volvió a ser nominado como mejor actor de reparto. Mineo actuó también en la superproducción bélica "El día más largo (1962)" y "El gran combate (1964)", último western dirigido por John Ford.

A finales de la década de 1960, cansado de interpretar personajes similares y un tanto mayor para ellos, Mineo regresó al teatro, donde no se limitó a actuar, sino que incluso puso en escena la obra "Fortune and men’s eye", de John Herbert, en 1969.
 
Mineo desarrolló una prolífica carrera televisiva de apariciones estelares en muchas series como en: Combate: The Brothers, Ellery Queen, Joe Forrester, Historia policial, S.W.A.T., Misión: Imposible y Columbo.
 
Se dice que hizo una prueba para un papel en la película "Lawrence de Arabia" y no fue elegido. Su última participación en cine fue en 1971: un breve papel en la segunda secuela (3ª parte de la saga) de la película de "El planeta de los simios".
  
Sal Mineo fue acuchillado el 12 de febrero de 1976 cuando regresaba a su domicilio en West Hollywood después de un ensayo teatral. Tenía 37 años.

Su final coincidió tristemente con el tipo de papeles que acostumbró a dar en el cine.

20/4/12

El primer Oscar de Miss Taylor

"Una Mujer Marcada", de 1960, supuso el primer Oscar para Miss Taylor. El film es una adaptación de la novela Butterfield 8, publicada en 1935 por John O'Hara.


La historia se basa a su vez en un caso real de la muerte en extrañas circustancias de la prostituta de lujo del Nueva York de los años 40, Starr Faithfull, quien en la novela acaba arrojándose al mar desde un barco, y en el film, transformada en Gloria Wandrous, termina estrellándose en una accidente de automóvil. La película fue suavizada para poder cumplir las estrictas normas del Código Moral de Producción impuesto.

El film, un melodrama convencional, destaca básicamente por la interpretación de Miss Taylor, algo que sorprende, pues la actriz intervino obligada por el contrato que estaba a punto de expirar con la MGM. Por ello, y por miedo a las represalias que hubieran podido obligarla a no realizar su siguiente película con la Fox, "Cleopatra",  tuvo que someterse a la voluntad del estudio, pero, eso sí, bajo unas condiciones.

Miss Taylor obligó a la MGM a que, por aquel entonces su marido, Eddie Fisher, interviniera en el film con un pequeño papel. También exigió que Helen Rose diseñara su vestuario y que Sid Guilaroff la peinase. La actriz despreciaba el guión e intentó cambiarlo en todo momento, a lo que el productor se negó categóricamente, creando por ello todo tipo de problemas durante el rodaje. Laurence Harvery, el coprotagonista de la película, la consideraba una "arpía", aunque finalmente, al terminar el rodaje, se hicieron buenos amigos.

Una vez acabada la filmación, Miss Taylor, cuya afición por la bebida ya había comenzado, arrojó su copa contra la pantalla en la sala de proyección del estudio durante el visionado de la primera versión de la copia que pudo ver el equipo.

Embarcada ya en el rodaje de "Cleopatra", Miss Taylor tuvo que ser ingresada de emergencia en la London Clinic, donde un equipo de cirujanos la practicaron una traqueotomía para salvarla de la neumonía severa con la que ingresó.Tras su recuperación, en una cena en Los Ángeles, la estrella pronunció  un conmovedor discurso relatando su milagrosa salvación a un paso de la muerte, que pronto fue portada de todas las publicaciones, provocando, entre otras cosas, que su nombre apareciera entre las cinco candidatas a los Oscar por su interpretacion en "Una Mujer Marcada".

Un més después, tras cuatro nominaciones consecutivas, obtuvo la ansiada estatuilla de la Academia, consciente de haberla ganado por una interpretación inferior a los trabajos de sus dos anteriores films. Según dicen, incluso la propia Debbie Reynols, enemiga suya desde que Miss Taylor le arrebatara el marido, votó por ella, creyendo que se encontraba en las puertas de la muerte.

La actriz Shirley MacLaine, favorita de aquel año por su interpretación en "El Apartamento", llegó a declarar: "He perdido contra una traqueotomía".

16/4/12

Entrevista en "The Big Show" ft. Miss Dietrich

1950. La televisión había invadido la conciencia nacional, pero la radio seguía gobernando las ondas. Y aquel mes de noviembre Tallulah, comenzó a emitir su entretendo programa de radio, "The Big Show". Se emitía en directo cada tarde de domingo entre las seis y media y las ocho, y se convirtió instantáneamente en una adicción nacional. Para miles de lesbianas americanas de clase media y alta, el programa de Tallulah era el centro de un ritual social. Acompañadas por bebidas fuertes, se reunían alrededor de la radio para reirse con Tallulah y sus amigos y amantes, un animado grupo que incluía a Joan Crawford, Ethel Barrymore, Edith Piaf, Groucho Marx, Gary Cooper, y Judy Garland entre otros.

Una de las primeras invitadas, el 7 de enero de 1951, fue Marlene.


(...)

MARLENE. Ese traje que llevas, ¿De qué color es?

TALLULAH. Bueno, es un nuevo color; gris acorazado.

MARLENE. ¿Gris acorazado? Es encantador, ¿pero no te queda un poco apretado en la zona de la sala de calderas?

TALLULAH. Tendrías que ver los precios que te clavan por lo vestidos... Me clavaron en todas las tiendas de París...

MARLENE. Sí, oí que te clavaron en París...

TALLULAH. Marlene, por favor, dejemos estas tonterías. Vamos a seguir así indefinidamente... Dime, querida, ¿que le ocurrió a ese chico divino que salía contigo? ¡Geoffrey!

MARLENE. Oh, lo dejamos...

TALLULAH. ¿De verdad, querida? ¿Del todo?

MARLENE. No, sólo temporalmente. Se casó...

TALLULAH. Tienen la maldita manía de hacerlo. Mira, Marlene, tenemos que enfrentarnos a ello; el problema de los hombres empeora cada año.

MARLENE. Tienes tanta razón, Tallulah... No se lo admitiría a cualquiera, pero un dia de la semana pasada tuve que comer sola.

TALLULAH. ¡Nooooooooooooo! Bueno, si crees que eso es grave, ya que me has contado, te contaré algo yo. Un día, hace más o menos un mes, ¡desayuné sola!

MARLENE. ¡Qué vergüenza! Parece que los hombres están desapareciendo...

(...)

11/4/12

¿Pero qué engaño es esto?

Ultimamente, desde hace ya una temporada, vamos todos los lunes a la biblioteca del barrio a coger algunos DVDs para verlos durante la semana. La verdad es que en casa tenemos una bastante abultada coleccion de DVDs originales, y si a esto le sumamos que el Torrent en casa funciona casi 24 horas al día, cabría preguntarse el porqué. Difícil respuesta, digamos que todo cinéfago siempre quiere más de lo que tiene, asique siempre estamos a la búsqueda de films que no hayamos visto. De esta forma estamos visionando toda la etapa británica de Hitchcock.

El pasado lunes, entre otros DVDs, cogimos "La extraña mujer" (1946) con la grande entre las grandes Miss Hedy Lamarr. No sé por qué, pero ultimamente no paro de leer sobre ella, además de sobre otra grande, Miss Tallulah Bankhead.

El caso es que conociendo ligéramente el argumento del film, me dispuse a leer el breve resumen que todo DVD trae en un reverso. Decía lo siguiente:

"Ángel, una famosa cantante de cabaret, se casa con un esforzado cantante. Ella usa sus contantos para ayudar a su esposo a conseguir el éxito. Ángel empieza a beber y a medida que su marido su hace más famoso, ella se hunde más en la bebida... "         

Fijándose en la descripción del film, resulta un tanto curioso eso de "esforzado cantante", como muy telenovelesco. Pero me llamó la atención, además del cartel del film, un tanto sinsentido, pero llamativo al fin y al cabo.
Edición de Suevia Films

Ayer vimos la película, y cual fué nuestra sorpresa al darnos cuenta que el argumento no tiene absolutamente nada que ver con su descripcion. De hecho, la sinopsis adecuada sería:

"Bangor, 1824. Jenny Hager, gracias a su arrolladora belleza, es capaz de manipular a los hombres a su antojo y conseguir de ellos todo lo que se propone. Tras casarse con un acaudalado comerciante, Jenny no tardará en seducir al hijo de éste con el fin de inducirle al asesinato de su padre, mientras por otro lado se encapricha del prometido de su mejor amiga... "

Y yo me pregunto... ¿quien era esa tal Ángel, famosa cabaretera como pocas?, ¿porque su marido, pese a ser un esforzado cantante, no logra el éxito en un primer momento?, ¿qué encantos usaba Ángel?, y sobre todo... ¿pero qué engaño es esto?

Indagando un poco, averigüé que la edición del DVD que había visto era de Suevia Films, una distribuidora, que aunque nos deleita con films clásicos que de otra forma sería imposible conseguir, muchas veces la calidad de dichos films dejan bastante que desear. No complendo que sea tan complicado al menos saber de qué trata el film de un DVD que estás vendiendo, me parece lo mínimo que uno puede pedir, teniendo en cuenta el precio de los mismos, y tanta ley Sinde y tonterias varias.

Edición de Versus

Afortunadamente, la edición de Suevia Films se encuentra descatalogada, y hace un par de años Versus, dentro de su colección Cinema Bis, editó de nuevo el film con una edición bastante competente.

Pese a todo lo dicho, film muy recomendable. Os animo a descubrir el lado mas cinematógrafico de una femme fatale, como Miss Lamarr.



9/4/12

En Neorrealismo Italiano. Parte II

ASPECTOS FORMALES

¿En qué radica su sustancial diferencia con lo anteriormente realizado en el séptimo arte para que este “movimiento estético”  sea elevado a los altares de arte con estilo propio?:

1. El contenido: para entender el contenido del cine neorrealista hay que hacer una pequeña reflexión sobre su antecedente inmediato, es decir, la cinematografía italiana del período 1930-1943. Marcada por el signo del fascismo, es decir, por la censura, el arte cinematográfica no podía levantar un vuelo sostenido más allá de la atenta vista avizor de sus guardianes. Las películas no podían mostrar la delincuencia o la pobreza y tampoco estaba permitida la sátira; se trataba de dar la imagen de una nación intachable y perfecta. Las producciones, por lo tanto, debían ser constreñidas a historias sin trasfondo social, con un simple fin de divertimento y siempre utilizadas como instrumentos de propaganda del régimen.

Desde 1945 (con la derrota militar y en plena guerra civil) se observa un giro en las producciones audiovisuales, donde unos se decantaron por un mero formalismo o decorativismo insustancial (como Soldati, Castellani, Lattuada, Poggioli o Alessandrini) y otros, en cambio, más radicales, como por ejemplo Lizzani tomaron el camino de la crítica social encubierta bajo un tono realista llevado más allá de una simple formulación de principios. Sea como fuere, el hecho es que el neorrealismo pronto advirtió un registro y tono muy diferente al conocido durante la etapa fascista.

De este modo, el más significativo elemento que permite comprender el efecto de "ruptura" de los primeros largometrajes del nuevo movimiento, como "Roma, citta aperta" (Rossellini, 1945) o "Sciusciá" (De Sica, 1946), es que en ellos se refleja con total transparencia la Italia triste, en blanco y negro y hambrienta de la posguerra, la resistencia y los caídos en la contienda. Sin embargo, esta temática no supone, ni mucho menos, una novedad de la historia del cine. La verdadera grandiosidad de este movimiento se refiere específicamente a su estilo. S. Chatman asevera en su magistral Historia y discurso que todo relato se basa en un qué (contenido semántico o historia) y un cómo (trazos formales y estéticos o discurso), de ahí la inseparable dicotomía entre ambos, quienes, en visión ecléctica u holística, significan más en conjunto y a partir de su unión de lo que la simple adición de sus partes confortantes podía aportar.

2. El estilo: En este campo también se produjo una ruptura total con el cine elaborado hasta 1945. Se pasa del espectáculo, las estrellas y los grandes estudios, a un “nuevo cine”, que sacrificaba abiertamente la perfección técnica a favor de la eficacia de la expresión directa.

En términos generales, las innovaciones que introdujeron los cineastas neorrealistas al lenguaje audiovisual fueron, entre otras y principalmente, las siguientes:
  • El sentimiento sobre la imagen: Siguiendo la línea del cine de Charles Chaplin, el neorrealismo da más importancia a los sentimientos que a la composición icónica, pero sin despreciar ésta. Se otorga mucha importancia al guión como foco fundamental de expresión, por lo que el peso de los diálogos es fundamental. Suelen utilizar el dialecto como forma de lenguaje más esencial y más auténtica, lo que conecta perfectamente con la idea de retratar la realidad tal y como la perciben.
  • La muerte del actor: Se basa en la idea, ya mencionada, de presentar la realidad sin ningún artificio. Así, no es de extrañar que uno de los “estandartes” del neorrealismo fuera el de: "¡Abajo las estrellas!". El cine, como ya había experimentado Frederich Murnau, no necesita de actores, sino de hombres y mujeres que narren su propia vida, que no actúen, sino que se comporten como son y que se encarnen a sí mismos. Se trata de una ecuación de base paritaria ser = parecer. El actor, nos dice el neorrealismo, no debería existir, pues cada uno debe ser el intérprete de sí mismo, y el querer que un hombre recite lo que experimenta otro es falsear la realidad.
  • Dos nuevos tipos: la mujer y el niño: El cine neorrealista, como hemos comentado, utiliza (arque)tipos, en vez de actores. Introdujo, además, dos no muy utilizados anteriormente. El primero de ellos fue la mujer, debido a que, durante los últimos años de la guerra, el cine italiano apenas contaba con intérpretes femeninas. Esto se ve con total claridad en filmes como: "Nosotras las mujeres" o "Roma a las once". El otro tipo que introduce es el niño, elemento influenciado (una vez más) por el cine de Charles Chaplin (The kid, 1921). El cual fue perfectamente explotado en películas como "Ladrón de bicicletas" (1948) o "Milagro en Milán" (1950), ambas de Vittorio de Sica.
  • El recurso de la improvisación: Es un recurso indispensable de este estilo cinematográfico, ya que para describir la realidad hay que entender su naturaleza dinámica. Por ello, no hay rigidez, todo es flexible y cambiante. Ejemplo de ello es la película "Paisá" (1946, Rossellini), en la que el director únicamente dejó preestablecido antes de grabar, el lugar del rodaje. Después hizo transportar allí todo el equipo, reclutó actores no profesionales en el momento y realizó entre ellos encuestas para precisar el curso que debía seguir el argumento.
3. La posición moral: Es el alma mater que mejor define este movimiento. Todas la cintas expresan una fulgurante necesidad de sinceridad, de descripción cruda de la realidad; Y siempre con un fin didáctico a nivel moral. Muchos de los directores neorrealistas eran cercanos al Partido Comunista Italiano, que tantos fieles arrastró durante décadas en Italia. El cine neorrealista tiene una serie de principios morales (entre los que destaca la importancia del hombre) que siguen una línea de origen
cristiano. Así se ve, en toda la obra de Rossellini o Pasolini (homosexual, católico y comunista), marcada por la caridad, o en la de De Sica, marcada por la solidaridad.

4. El sentido de protesta: Cuyo objetivo era impulsar la séptima arte no como una forma de entretenimiento, sino como método de crítica, como instrumento político. El Nuevo Realismo pretendía hacernos reflexionar sobre nosotros mismos, nuestras creencias y prejuicios, y romper el muro que separaba la Italia deprimida de la próspera modernidad.

3/4/12

Y con ella llegó el escándalo...Tallulah Bankhead

Tallulah Bankhead fue un icono de la provocación. Una mujer de los años 20, no sujeta a las reglas que dictaban los hombres. Una actriz que vivió de forma extrema y nunca tuvo problemas para expresarlo, haciendo apología de sus diversos vicios. Suya es la frase "la cocaína no crea adiccion, lo sé porque llevo tomándola desde hace años" y la no menos popular "si volviera a nacer cometería los mismos errores, pero mucho antes".


Tras esa frívola imagen de mujer fatal había una mujer de pasiones irrefrenables, a la que no pudo vencer su educación en un convento ni los tabúes de una sociedad hipócrita, dispuesta a vivir y amar más allá, con toda la intensidad necesaria, no privándose del uso de substancias artificiales que le proporcionasen el ansiado y probablemente nunca saciado placer.

No destacó por su carrera en el cine (Marlon Brando decía que fue debido a sus adicciones al alcohol y al sexo), ya que no quiso ceder a la presión y el acoso de las estrellas como John Barrymore, por quien perdió su primer papel importante (Dr. Jekyll & Mr. Hyde, 1920) al no querer acostarse con él. Intentó triunfar en Broadway, pero fue en Londres donde consiguió convertirse en una estrella. En su corta carrera cinematográfica podemos destacar títulos como Honor Mancillado (Tarnished Lady, 1931) de George Cukor, Náufragos (Lifeboat, 1944) de Alfred Hitchcock y La Zarina (A Royal Scandal, 1945). Tras ésta película tardaría 10 años en volver a Hollywood, centrándose en su carrera teatral. Su último papel fue en la serie Batman en 1966.

Pero lo más jugoso de Tallulah sigue siendo su forma de ser y actuar en cada momento. En una ocasión en que un periodista le preguntó que habría sido de no ser actriz ella respondió “dudaba entre madre superiora, puta y presidente de los Estados Unidos. ¡Espero que pongas en tu libreta que habría hecho de maravilla las tres cosas!”. En otra ocasión un doctor le recomendó para superar su alcoholismo que tomara una manzana cada vez que sintiera la necesidad de agarrar la botella, a lo que Tallulah respondió: "¡Pero doctor!, ¿sesenta manzanas al día?". También son multitud las anécdotas que forman la mitología de la estrella, en una fiesta a la que acudió como invitado Truman Capote propuso que todos los invitados se bañaran en la piscina. Ella apareció vestida sólo con sus perlas, decía que lo hacía para demostrar que era una rubia natural.

Solía acudir a los rodajes de sus películas sin ropa interior, lo que generaba gran alboroto. En el rodaje de Náufragos el equipo se quejó del desmesurado exhibicionismo de Tallulah, a quien le gustaba dejar ver lo que escondía bajo la falda. Hitchcock, con su iniguable flema británica repuso no poder resolverlo porque no sabía a qué departamento acudir, vestuario o peluquería.

Entre los muchos amantes de Tallulah hay hombres y mujeres de todos los credos y razas, entre ellos Marlon Brando, Mercedes de Acosta, la más conocida de las amantes de las estrellas, quien también compartió lecho con Greta Garbo y Marlene Dietrich, también tuvo una relación con una actriz más joven, la bella Lizabeth Scott, que inspiró la que mantienen Ann Baxter y Bette Davis en Eva al desnudo. Tenía fijación por las mujeres negras, tuvo un romance con Hattie McDaniel, la inolvidable Mammy de Lo Que El Viento Se Llevó (Gone With The Wind, 1939), primera actriz negra en ganar un Oscar y con la genial cantante Billie Holiday.

Perdió grandes papeles de Hollywood debido a sus adicciones, es el caso de Encuentro en la Noche (Clash by Night, 1952) que en su adaptación al cine por Fritz Lang contó con Barbara Stanwyck para el papel principal pese a que Tallulah lo había interpretado en Broadway. Tampoco consiguió el papel de la versión cinematográfica de Eva al Desnudo (All About Eve, 1950) de Joseph L. Mankiewicz, pese a haber bordado el papel en la versión teatral. En este caso el papel fue a manos de Bette Davis, una de sus mayores rivales. Bette también le "robó" el papel de La Loba (The Little Foxes , 1941) de William Wyler. Refiriéndose a ella dijo: "no creais que no se quién ha estado contando cotilleos sobre mí... después de todas las cosas buenas que he hecho por esa arpía, ¡cuando la coja, voy a arrancarle cada pelo de su bigote!".

Independientemente de su escandalosa vida privada, o tal vez gracias a ella, Tallulah fue un personaje muy popular. De hecho existe un pueblo en Luisiana llamado Tallulah porque en los años 30 ella pasó una noche allí. Su último e involuntario legado, fue inspirar uno de los personajes más bizarros y demoníacos de la animación, la Cruella de Vil de 101 Dálmatas. Pero ningún homenaje es suficiente para la mujer que dijo "decid cualquier cosa de mí, mientras no sea aburrida".

2/4/12

En Neorrealismo Italiano. Parte I

El cine neorrealista italiano ha sido elevado al concepto de estilo artístico del séptimo arte. Su origen se encuadra en los años inmediatamente anteriores y posteriores al fin de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).

¿Movimiento o escuela?. Si atendemos al puro concepto cinematográfico, nos hallamos ante un tipo de cine desarrollado por una serie de directores y autores en forma de acciones colectivas e individuales. Reacción declarada al régimen fascista de Mussolini, que Italia sufrió desde 1922 a 1945, y que concluyera con el fusilamiento de éste al norte de Italia mientras trataba de huir camuflado con soldados a la neutral Suiza. En este caldo de cultivo surgió el llamado “nuevo cine italiano”, que emprendió rumbos estilísticos totalmente distintos a los políticamente correctos de la época de la hegemonía fascista.

No es árbol el cine de un solo fruto: Junto al neorrealismo, aparecieron dos corrientes cinematográficas con el mismo denominador común: la oposición al cine propagandístico del régimen. La primera, es la llamada corriente de los calígrafos, donde destaca el director Alberto Lattuada (Giacomo el idealista, 1943) y cuyo rasgo principal era la adaptación de obras literarias antiguas al medio audiovisual, corriente ésta muy al gusto de los primeros pasos cinematográficos ítalos. La segunda, es la línea de la objetividad documental, denominada así por su enconada crítica a la objetividad oficial (marcada con la figura del héroe) que llevan a cabo. Sin embargo, “il nuovo stilo” que más repercusión tuvo en el cine extranjero y que produjo mejores largometrajes es el Realismo Nuevo (“Neorrealismo” como denominación del nuevo concepto).

EL TÉRMINO

El nombre de neorrealismo fue utilizado por primera vez por el intelectual Norberto Barolo, para referirse a una película francés (El muelle de las brumas, 1938, de Marcel Carné) que más tarde se encuadró dentro del otro realismo, el tildado de poético (descripción de la realidad utilizando la sensibilidad propia de la poesía).


No obstante a quien consideramos como avanzado y que aplicó el término neorrealismo a la nueva corriente cinematográfica surgida en la Italia de la posguerra fue Umberto Bárbaro, crítico y guionista de cine que recuperó el término de Barolo en un artículo de la revista II Film (Roma), en 1943. Bárbaro analiza en el artículo “El muelle de las brumas” lo interesante que sería tratar la realidad del mismo modo que se hace en la citada película. Fue un hallazgo casual, pero muy efectivo. Se denominó neorrealismo porque se trataba de un "nuevo" realismo italiano (en este sentido, el maestro Visconti rechazaba absolutamente el prefijo "neo") que nada tenía que ver con el realismo de la época silente italiana (títulos como Assunta Spina, de Gustavo Serena, y Sperduti nel buio, de Nino Mortoglio).

Al contrario que en otros países como Francia o la antigua Unión Soviética, en Italia no se heredó la influencia de los grandes directores rusos como Pudovkin o Eisenstein, sino que apareció un estilo estrictamente nacional, intransferible e italiano. Así, en cada una de sus obras se respira esa "italianeidad", tanto en el aspecto formal como en el temático.

Es importante entender que el prefijo "neo" no se refiere a las obras nuevas del cine italiano en relación a las del período anterior a la guerra, sino a la nueva realidad (quizá antigua como la vida misma, pero sin los edulcorantes de los fascios de combattimento) de la vida nacional que se convirtió en el tema por excelencia de esta corriente cinematográfica.

El neorrealismo cambia la visión de la séptima arte como mera forma de distracción para, haciendo honor a su nombre, convertirse en una herramienta de polémica y crítica social a la situación de posguerra que sufrió Italia durante y sobre todo tras la Segunda Guerra Mundial.